Año nuevo, Pixel nuevo. Por partida doble, y ya van unos cuantos. La octava generación del teléfono made by Google, acompañada de la habitual versión Pro, llegó entre fanfarrias por una promesa de las que el usuario agradece: siete años de actualizaciones aseguradas por su fabricante.
Por lo demás, algunas mejoras no-tan-evidentes a simple vista, como las de su pantalla Actua OLED o las novedades de su chip Tensor G3, o las mejoras fotográficas basadas en Inteligencia Artificial.
Y bueno, una subida de precios de las que cuesta un poco digerir. Pero veámosla en contexto.
Miiiiiil eeuuurooooos
Los Pixel 8 y 8 Pro llegan a un precio de salida de 799 y 1.099 euros en España, respectivamente. Eso son 150 y 200 euros de subida respecto a los mismos modelos de la versión 7, una noticia de las que requieren un poleo menta para ayudarlas a caer garganta abajo.
Además, esta subida se ha producido en 2023, cuando ya ha pasado más de un año desde que la inflación llegó al doble dígito en España. No sienta igual una subida en aquel contexto que en este, cuando se supone que los precios ya están estabilizándose y cuando el incómodo vecino anunció una sorprendente rebaja en casi todos sus nuevos modelos.
Así queda la evolución del precio de los Pixel en España desde que salió el primer modelo de 2016, cuando se dio el salto desde la marca Nexus. Recordemos que no todos los modelos llegaron en todas sus variantes al mercado español.
Efectivamente, el Pixel 8 Pro es el más caro de la historia, al menos en precio nominal, tocando los 1.100 euros. El Pixel 8, en cambio, queda por detrás del Pixel 3, que le superó en 50 euros, y eso que llegó un lustro antes.
Pero estos precios no incluyen el ajuste por inflación, que ayuda a homogeneizar las cifras y entender quién fue realmente más caro. Y ahí cambian algunas tornas.
Así sí se aprecia con claridad que el Pixel 3 fue el más caro de la historia, tanto en su versión estándar como en su versión XL, equivaliendo sus precios de entonces a 999 y 1.175 euros actuales.
Si miramos al modelo ‘a’, el Pixel 7a es el más caro, con casi 530 euros que habrá que ver si supera o no el 8a cuando sea anunciado, presumiblemente la primavera que viene.
La inflación, muy baja y estable e incluso negativa durante la década pasada, se disparó en 2021 y especialmente en 2022, provocando que tengamos que repensar nuestra valoración de los nuevos precios respecto a los que había hace unos años.
Más allá de eso, podemos discutir si la subida de precios del Pixel 8 (menos acusada en Estados Unidos que en España) tiene justificación, al menos en función de la lista de especificaciones, que va abriendo una brecha cada vez superior respecto a la versión Pro.
A cambio, eso sí, podemos discutir sobre uno de los mayores factores diferenciales de un Pixel respecto a otros terminales Android: su software. Pero esa es otra cuestión.
En Xataka | Los Pixel de Google nunca han arrasado en ningún sitio. Con una excepción: el país más amante de lo raro.
Imagen destacada | Google.
– La noticia Los nuevos Pixel 8 parecen más caros que nunca… hasta que pensamos en la inflación fue publicada originalmente en Xataka por Javier Lacort .